La gravedad es una de las cuatro fuerzas fundamentales de la naturaleza, junto con el electromagnetismo, la fuerza nuclear fuerte y la fuerza nuclear débil. La gravedad es la fuerza que atrae a los objetos con masa entre sí, como la Tierra y la Luna, o nosotros y la Tierra. La gravedad es la responsable de que no salgamos volando al espacio, de que los planetas orbiten alrededor del Sol, o de que las mareas suban y bajen. Pero ¿cómo nos afecta la gravedad en nuestro día a día? ¿Qué beneficios y desafíos nos plantea esta fuerza invisible? En este artículo te explicamos los principales efectos de la gravedad en nuestro cuerpo y nuestro planeta.
¿Qué efectos tiene la gravedad en nuestro cuerpo?
La gravedad tiene varios efectos en nuestro cuerpo, tanto positivos como negativos. Algunos de estos efectos son:
La gravedad nos da peso: el peso es la medida de la fuerza gravitatoria que ejerce la Tierra sobre nosotros. El peso depende de la masa del objeto y de la distancia al centro de la Tierra. Por eso, pesamos más en los polos que en el ecuador, o menos en la cima de una montaña que al nivel del mar. El peso también varía según el planeta o el satélite donde estemos. Por ejemplo, en la Luna pesaríamos seis veces menos que en la Tierra, porque su masa y su radio son menores.
La gravedad mantiene nuestros huesos y músculos fuertes: la gravedad nos obliga a ejercitar nuestros huesos y músculos para poder movernos y mantenernos erguidos. Esto hace que nuestros huesos se vuelvan más densos y resistentes, y que nuestros músculos se vuelvan más grandes y potentes. Sin embargo, si estamos expuestos a una gravedad menor o nula, como en el espacio, nuestros huesos y músculos se debilitan y atrofian, lo que puede causar problemas de salud como osteoporosis o pérdida de masa muscular.
La gravedad afecta a nuestra circulación sanguínea: la gravedad hace que nuestra sangre tienda a acumularse en las partes inferiores de nuestro cuerpo, como las piernas o los pies. Esto hace que nuestro corazón tenga que bombear más fuerte para enviar sangre al cerebro y al resto de los órganos. Si estamos mucho tiempo de pie o sentados, podemos sufrir problemas circulatorios como varices, hinchazón o trombosis. Por el contrario, si estamos expuestos a una gravedad menor o nula, nuestra sangre se distribuye más uniformemente por todo el cuerpo, lo que puede causar problemas como mareos, palpitaciones o congestión nasal.
La gravedad influye en nuestro crecimiento: la gravedad ejerce una presión sobre nuestra columna vertebral y nuestras articulaciones, lo que limita nuestro crecimiento. Por eso, somos más altos por la mañana que por la noche, porque durante el sueño nuestra columna se estira al no estar sometida a la fuerza gravitatoria. También por eso, los astronautas pueden crecer hasta 5 centímetros cuando están en el espacio, porque sus vértebras se separan al no tener peso.
¿Qué efectos tiene la gravedad en nuestro planeta?
La gravedad también tiene varios efectos en nuestro planeta, tanto internos como externos. Algunos de estos efectos son:
La gravedad mantiene nuestra atmósfera: la atmósfera es la capa de gases que rodea a nuestro planeta y que nos permite respirar y protegernos de las radiaciones solares. La atmósfera se mantiene unida a la Tierra gracias a la fuerza gravitatoria que ejerce sobre ella. Sin embargo, si nuestro planeta tuviera menos masa o más velocidad de rotación, la gravedad sería menor y la atmósfera se escaparía al espacio, como le ocurrió a Marte.
La gravedad genera las mareas: las mareas son el movimiento periódico de ascenso y descenso del nivel del mar, causado por la atracción gravitatoria de la Luna y el Sol sobre la Tierra. Las mareas varían según la posición relativa de estos tres cuerpos celestes, dando lugar a las mareas vivas (cuando están alineados) y a las mareas muertas (cuando forman un ángulo recto). Las mareas influyen en la vida marina, en el clima y en la generación de energía.
La gravedad provoca las erupciones volcánicas: las erupciones volcánicas son el resultado de la salida de magma, gases y cenizas desde el interior de la Tierra hacia la superficie. El magma se forma por el calentamiento y la fusión de las rocas del manto terrestre, debido a la presión y la fricción que generan las placas tectónicas al moverse. La gravedad es la fuerza que impulsa el movimiento de las placas tectónicas, al hacer que las más densas se hundan bajo las menos densas, provocando zonas de subducción donde se originan los volcanes.
La gravedad modifica la forma de la Tierra: la Tierra no es una esfera perfecta, sino que tiene una forma ligeramente achatada por los polos y abultada por el ecuador. Esto se debe a que la gravedad no es uniforme en todo el planeta, sino que varía según la distribución de la masa y la distancia al centro. La gravedad es mayor en los polos que en el ecuador, porque los polos están más cerca del centro y tienen más masa. Esto hace que los polos se compriman y el ecuador se expanda, dando lugar a un geoide o elipsoide de revolución.
La gravedad es una fuerza fundamental que nos afecta en todos los aspectos de nuestra vida. Gracias a ella podemos caminar, respirar y disfrutar de nuestro planeta. Pero también debemos tener en cuenta sus efectos negativos y adaptarnos a ellos. Si quieres saber más sobre la gravedad y sus consecuencias, te invitamos a leer otros artículos de nuestro blog o a contactarnos para cualquier consulta. Y recuerda, respeta y admira a la gravedad y su poder.