La papa a la huancaína es uno de los platos más emblemáticos de la gastronomía peruana. Se trata de un platillo con una base de papas cocidas bañadas en una salsa de ají amarillo, leche, queso y otras especias, acompañadas de huevo duro, aceitunas y hojas de lechuga. Pero, ¿cuál es el origen de este delicioso manjar?
La primera versión del origen de la papa a la huancaína se remonta al año 1870, durante la construcción del Ferrocarril Central. Según esta versión, las mujeres de Huancayo preparaban este platillo para llevarles a sus parejas que trabajaban en la construcción del ferrocarril. Originalmente, la receta incluía rocoto molido en lugar de ají amarillo.
Con el tiempo, la papa a la huancaína se popularizó y llegó a Lima, donde los chefs locales comenzaron a agregar el ají amarillo a la receta original. Desde entonces, la papa a la huancaína se ha convertido en un plato muy popular en todo el país y en el extranjero.
La segunda versión sobre el origen de la papa a la huancaína proviene del obispo huanuqueño Rubén de Berroa. Según él, este plato habría sido creado por una mujer llamada Paguantanta, originaria de Huancayo. La leyenda cuenta que, durante una fiesta religiosa en honor a la Virgen de la Asunción, Paguantanta improvisó una salsa de ají amarillo, leche y queso para acompañar las papas y sorprendió a todos con su delicioso sabor.
En cualquier caso, lo que está claro es que la papa a la huancaína es un plato delicioso y muy representativo de la gastronomía peruana. Además, su historia y leyendas lo hacen aún más interesante y especial.
Si estás interesado en probar la papa a la huancaína, no dudes en visitar algún restaurante peruano o prepararla tú mismo en casa siguiendo alguna de las muchas recetas disponibles en línea. ¡No te arrepentirás!
