Después de una serie de rumores y especulaciones, finalmente Paolo Guerrero rompió el silencio sobre su decisión de no cumplir con el contrato que lo vinculaba a la Universidad César Vallejo de Trujillo. El delantero, preocupado por la seguridad de su familia tras amenazas recibidas, dejó en claro que no tiene intención de poner un pie en el norte del país.
Sin embargo, la reacción de la directiva del club trujillano, especialmente de la familia Acuña, ha sorprendido a muchos. A pesar de las circunstancias, el club ha emitido una convocatoria oficial para que Guerrero se presente en las instalaciones del equipo el sábado 17 de febrero de 2024.
«En estricto cumplimiento de las disposiciones contenidas en el contrato de trabajo que nos vincula, así como las disposiciones reglamentarias vigentes: SE LE CONVOCA OFICIALMENTE para que el día sábado 17 de febrero 2024 se apersone a las instalaciones de nuestro club. Para lo cual se está procediendo a la emisión de los respectivos billetes de avión, a su nombre, teniendo como itinerario la ciudad de Río de Janeiro, la ciudad de Trujillo, con escala previa en la ciudad de Lima», reveló la comunicadora Verónica Linares durante el programa ´Primera Edición´.
Esta decisión ha generado una gran controversia, ya que Paolo Guerrero ha dejado en claro que no está dispuesto a poner en riesgo la seguridad de su familia. En una entrevista reciente, el goleador histórico de la Selección Peruana reiteró su postura de no viajar a Trujillo, lo que podría desencadenar un nuevo conflicto entre el jugador y la directiva del club.