El lateral derecho peruano Jhilmar Lora se ha convertido en uno de los jugadores más cotizados del fútbol sudamericano gracias a sus destacadas actuaciones con Sporting Cristal. Su rendimiento ha atraído el interés de grandes clubes internacionales, siendo el City Group, el conglomerado dueño de equipos como Manchester City y New York City FC, uno de los principales interesados. Sin embargo, las negociaciones han encontrado un obstáculo debido a la alta valoración que ha puesto Sporting Cristal en su jugador, cifrada en 3 millones de dólares.
El interés del City Group es claro. El conglomerado busca a Lora como parte de su ambicioso proyecto de expansión y desarrollo de talento en sus clubes afiliados. En particular, se ha considerado la posibilidad de que el lateral peruano sea cedido al Bahia de Brasil, un equipo que forma parte de la red de clubes del City Group. Lora encaja perfectamente en el perfil de jugador que buscan: joven, con gran proyección y un alto potencial.
Sin embargo, Sporting Cristal no está dispuesto a negociar a la baja. El club peruano considera que la cifra de 3 millones de dólares es justa por el potencial y las cualidades de Lora, un jugador que no solo ha destacado en la liga local, sino también con la Selección Peruana. Recientemente, el club rechazó una oferta de 1,1 millones de dólares del DC United, mostrando su firmeza en la negociación.
Las negociaciones se han complicado debido a la diferencia de valoración entre las partes. Mientras que el City Group busca reducir el monto de la transferencia, Sporting Cristal mantiene su postura. Factores como el creciente valor de mercado de Lora, el interés de otros clubes, y la necesidad de generar ingresos por parte del club peruano están influyendo en este proceso.
El futuro de Jhilmar Lora sigue siendo incierto. Aunque tiene múltiples ofertas, Sporting Cristal no lo dejará ir a cualquier precio. El club buscará obtener el mejor beneficio económico por la venta de su jugador, pero también tendrá que considerar las ambiciones deportivas de Lora, quien sueña con dar el siguiente paso en su carrera. Este caso refleja cómo el fútbol moderno ha elevado el valor de los jugadores jóvenes y cómo las negociaciones se vuelven cada vez más complejas.