Seguramente te has preguntado alguna vez cómo es el interior de nuestro planeta y por qué en el centro de la Tierra hace tanto calor. En este artículo te explicaremos las principales características y las causas del calor del núcleo terrestre.
Las capas de la Tierra
La Tierra está formada por varias capas concéntricas que se diferencian por su composición, densidad y temperatura. De afuera hacia adentro, estas capas son:
La corteza: es la capa más externa y delgada de la Tierra, donde se encuentran los continentes y los océanos. Su grosor varía entre 5 y 70 km y está compuesta principalmente por rocas silíceas.
El manto: es la capa intermedia y más gruesa de la Tierra, que ocupa el 80% del volumen del planeta. Su grosor es de unos 2.900 km y está compuesta por rocas ricas en hierro y magnesio. El manto se divide en dos partes: el manto superior, que es sólido pero plástico, y el manto inferior, que es más denso y viscoso.
El núcleo: es la capa más interna y caliente de la Tierra, donde se generan el campo magnético y las corrientes de convección. Su radio es de unos 3.400 km y está compuesto principalmente por hierro y níquel. El núcleo se divide en dos partes: el núcleo externo, que es líquido y está en movimiento, y el núcleo interno, que es sólido y cristalino.
La temperatura del núcleo terrestre
La temperatura del núcleo terrestre es muy elevada y varía según la profundidad. Según los últimos cálculos, la temperatura del núcleo externo oscila entre 4.000 y 6.000 ºC, mientras que la temperatura del núcleo interno puede alcanzar los 6.000 ºC, lo que equivale a la temperatura de la superficie del sol.
¿Qué causa este calor extremo? Hay dos fuentes principales:
El calor residual: es el calor que quedó atrapado en el interior de la Tierra desde su formación hace unos 4.500 millones de años, cuando el planeta era una bola incandescente de materia fundida que se fue enfriando poco a poco.
El calor radiactivo: es el calor que se produce por la desintegración de elementos radiactivos como el uranio, el torio y el potasio, que se encuentran en pequeñas cantidades en el manto y en el núcleo terrestre. Estos elementos liberan partículas que chocan con las rocas circundantes y las calientan.
El calor del núcleo terrestre tiene importantes consecuencias para nuestro planeta, como:
El campo magnético: el movimiento del núcleo externo líquido genera una corriente eléctrica que crea un campo magnético alrededor de la Tierra, que nos protege de las partículas solares y cósmicas.
La tectónica de placas: el calor del núcleo terrestre provoca corrientes de convección en el manto superior, que hacen que las placas tectónicas se muevan sobre la corteza terrestre, originando fenómenos como los volcanes, los terremotos y las montañas.
La vida: el calor del núcleo terrestre mantiene una temperatura media global adecuada para la existencia de agua líquida y de vida en la superficie terrestre.
Como ves, el centro de la Tierra es un lugar fascinante y vital para nuestro planeta. Esperamos que este artículo te haya ayudado a entender mejor cómo es y por qué hace tanto calor.