Reparar un caño que gotea es una tarea común de mantenimiento en el hogar. Aquí tienes los pasos básicos para solucionar este problema:
Cierra el suministro de agua: Antes de realizar cualquier reparación, asegúrate de cerrar la llave de paso del agua que abastece al caño que gotea. Esto evitará que el agua siga goteando mientras trabajas en la reparación.
Reúne herramientas y materiales: Necesitarás algunas herramientas y materiales básicos para la reparación, como una llave ajustable, una llave inglesa, una cinta de teflón y, posiblemente, una junta o pieza de repuesto si el caño está dañado.
Drena el agua: Abre el caño para drenar cualquier agua residual que quede en la tubería.
Desmonta el caño: Utiliza las herramientas adecuadas para desmontar la parte del caño que está goteando. Esto puede implicar quitar la pieza dañada o apretar las conexiones sueltas.
Limpieza y aplicación de sellante: Limpia bien las superficies de las conexiones con un paño limpio y seco. Luego, aplica una capa de cinta de teflón en las roscas del caño y vuelve a ensamblar las partes, asegurándote de que estén bien ajustadas.
Verifica la reparación: Abre el suministro de agua y verifica si el caño gotea. Si el goteo persiste, puede ser necesario reemplazar una junta o una pieza dañada. En este caso, sigue los mismos pasos para desmontar y reemplazar la pieza.
Revisa nuevamente: Una vez que hayas realizado la reparación, verifica que el caño ya no gotea y que todas las conexiones estén selladas adecuadamente.
Restaura el suministro de agua: Si la reparación se ha realizado con éxito y no hay goteos, puedes volver a abrir completamente la llave de paso del agua.
Recuerda que si no te sientes cómodo haciendo la reparación por ti mismo o si el problema es complicado, siempre es recomendable llamar a un fontanero profesional para que realice la reparación de manera adecuada y segura.