Entiendo que te gustaría saber por qué algunos días te ves bien y otros no. Es normal que nuestra percepción de nosotros mismos varíe de un día a otro. Hay varios factores que pueden influir en cómo nos vemos, como la iluminación, el cansancio y el estrés.
Por ejemplo, la iluminación puede afectar la forma en que vemos los colores y las sombras, lo que puede hacer que nos veamos diferentes en diferentes momentos del día. Además, el cansancio y el estrés pueden afectar nuestra postura y expresiones faciales, lo que también puede influir en cómo nos percibimos a nosotros mismos.
También es importante recordar que la belleza es subjetiva y no hay una definición universal de lo que es “bonito”. En lugar de centrarte en tu apariencia física, te sugiero que te enfoques en desarrollar tu personalidad y habilidades. Trata de ser una persona amable, divertida y segura de sí misma. Aprende cosas nuevas, haz actividades que disfrutes y rodeate de personas que te hagan sentir bien contigo misma.
Recuerda que la aceptación personal es un proceso continuo y lleva tiempo. No te desanimes si no ves resultados inmediatos. ¡Sigue trabajando en ti misma y verás cómo poco a poco te sentirás más cómoda y segura con quien eres!