La ciencia tiene una explicación para esto. Cuando nos vemos en el espejo, siempre lo hacemos desde el mismo ángulo, lo que nos hace ver una imagen más familiar y agradable de nosotros mismos. En cambio, las fotos pueden ser tomadas desde diferentes ángulos y condiciones de iluminación, lo que puede hacer que nos veamos diferentes a como estamos acostumbrados a vernos.
Además, la cámara de un teléfono móvil puede distorsionar nuestra apariencia debido a la lente utilizada. Las cámaras de los teléfonos móviles suelen tener lentes gran angular, lo que puede hacer que nuestras caras se vean más anchas y redondas de lo normal. También es posible que la calidad de la imagen no sea buena, lo que puede afectar la forma en que nos vemos en las fotos.
Recuerda que la belleza es subjetiva y no hay una definición universal de lo que es “bonito”. En lugar de centrarte en tu apariencia física, te sugiero que te enfoques en desarrollar tu personalidad y habilidades. Trata de ser una persona amable, divertida y segura de sí misma. Aprende cosas nuevas, haz actividades que disfrutes y rodeate de personas que te hagan sentir bien contigo misma.
Recuerda que la aceptación personal es un proceso continuo y lleva tiempo. No te desanimes si no ves resultados inmediatos. ¡Sigue trabajando en ti misma y verás cómo poco a poco te sentirás más cómoda y segura con quien eres!