A medida que envejecemos, nuestro olor corporal puede cambiar. Aunque no todas las personas mayores huelen mal, algunas pueden notar un cambio en su olor corporal a medida que envejecen. Este cambio en el olor corporal se debe a una combinación de factores, incluidos los compuestos químicos y las bacterias que interactúan en la piel.
Uno de los compuestos químicos que se ha identificado como responsable del olor característico de las personas mayores es el 2-nonenal. A medida que ciertos productos químicos se descomponen en el cuerpo con la edad, el 2-nonenal es uno de los subproductos resultantes. Se ha detectado 2-nonenal en personas mayores de 40 años y los niveles parecen aumentar con la edad.
Además del 2-nonenal, otros factores como los cambios en las glándulas sudoríparas y las bacterias que viven en la piel también pueden influir en el olor corporal de las personas mayores. Aunque no hay evidencia de que estos cambios sean perjudiciales para la salud, algunas empresas han desarrollado productos de cuidado personal diseñados para disimular el olor asociado con el envejecimiento.
Es importante tener en cuenta que el olor corporal puede variar entre las personas y no todas las personas mayores experimentarán un cambio notable en su olor. Además, el olor corporal no es necesariamente un indicador de mala higiene personal. Si tienes preocupaciones específicas sobre tu propio olor corporal o el de un ser querido, te recomendaría hablar con un profesional de la salud que pueda brindarte orientación personalizada basada en tus circunstancias particulares.