La nieve es un elemento que nos atrae por su belleza y diversión, pero también puede ser un factor de riesgo para nuestra piel si no tomamos las precauciones adecuadas. ¿Sabías que las quemaduras en la nieve son más graves que en la playa? ¿A qué se debe este fenómeno y cómo podemos prevenirlo?
¿Qué son las quemaduras solares?
Las quemaduras solares son lesiones en la piel producidas por una exposición excesiva a la radiación ultravioleta (UV) procedente del sol. Esta radiación puede penetrar en las capas superficiales de la piel y dañar las células, provocando inflamación, enrojecimiento, dolor y descamación. En casos más graves, puede haber ampollas, fiebre y deshidratación.
Las quemaduras solares pueden afectar a cualquier persona, pero hay algunos factores que aumentan el riesgo, como tener la piel clara, los ojos claros, el cabello rubio o pelirrojo, estar bajo ciertos medicamentos o tener antecedentes de cáncer de piel. Las quemaduras solares pueden tener consecuencias a corto y largo plazo para la salud, como el envejecimiento prematuro de la piel, las manchas, las cicatrices o el cáncer de piel.
¿Por qué la nieve quema más que la playa?
Normalmente asociamos las quemaduras solares al verano y a la playa, pero el invierno también es una época de riesgo, especialmente cuando vamos a la montaña o pasamos un día en la nieve. Esto se debe a que la nieve potencia el efecto de la radiación UV sobre nuestra piel por dos motivos:
El albedo: El albedo es el porcentaje de luz que refleja una superficie. La nieve tiene un albedo muy alto, es decir, refleja casi toda la luz que recibe. Esto significa que cuando estamos en la nieve no solo recibimos la radiación UV directa del sol, sino también la reflejada por la nieve, lo que duplica o triplica la dosis de radiación sobre nuestra piel.
La altitud: A mayor altitud, menor es la protección de la atmósfera frente a la radiación UV. Se estima que por cada 1000 metros de altura, el efecto dañino de la radiación UV aumenta un 15%. Por eso, cuando estamos en la montaña estamos más expuestos a quemarnos que cuando estamos al nivel del mar.
Estos dos factores hacen que las quemaduras en la nieve sean más graves que en la playa, ya que recibimos una mayor cantidad de radiación UV en menos tiempo y con menos sensación de calor. Además, muchas veces no somos conscientes del riesgo y no usamos una protección adecuada.
¿Cómo prevenir las quemaduras en la nieve?
Para evitar las quemaduras en la nieve y disfrutar del invierno sin riesgos para nuestra piel, debemos seguir una serie de recomendaciones:
Usar un protector solar adecuado: Debemos aplicar un protector solar con un factor de protección alto (al menos 30) y resistente al agua y al sudor. Debemos hacerlo media hora antes de salir y repetirlo cada dos horas o después de cada actividad. Debemos cubrir todas las zonas expuestas, incluyendo el rostro, los labios, las orejas y el cuero cabelludo.
Usar gafas de sol: La radiación UV también puede dañar nuestros ojos y provocar quemaduras en la córnea, la retina o el cristalino. Por eso es fundamental usar unas gafas de sol con un filtro adecuado que bloquee el 100% de los rayos UV.
Usar ropa adecuada: Debemos vestirnos con ropa que nos proteja del frío y del sol. Lo ideal es usar varias capas de ropa transpirable y térmica, un gorro, una bufanda, unos guantes y unas botas impermeables. Debemos evitar la ropa oscura, que absorbe más la radiación UV, y optar por colores claros o reflectantes.
Evitar las horas de mayor radiación: Debemos evitar exponernos al sol entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde, que son las horas de mayor radiación UV. Debemos buscar la sombra siempre que sea posible y no confiarnos por las nubes, que no bloquean la radiación UV.
Hidratarse y cuidar la piel: Debemos beber abundante agua para mantenernos hidratados y evitar la deshidratación. También debemos cuidar nuestra piel con cremas hidratantes y reparadoras después de cada exposición al sol. Si tenemos alguna quemadura, debemos aplicar compresas frías, cremas calmantes o aloe vera y consultar con un médico si es necesario.