El triángulo de las Bermudas es una región del océano Atlántico que abarca un área de unos 1.5 millones de kilómetros cuadrados entre las islas Bermudas, Puerto Rico y Miami, en Estados Unidos. Desde hace décadas, este lugar ha sido escenario de numerosas desapariciones de barcos y aviones que han alimentado todo tipo de teorías y leyendas.
¿Qué hay de verdad y qué hay de mito en estos sucesos? ¿Existe alguna explicación científica o racional para lo que ocurre en el triángulo de las Bermudas? Veamos algunos datos y argumentos al respecto.
El origen del misterio
El interés por el triángulo de las Bermudas se remonta al año 1945, cuando cinco aviones de la marina estadounidense desaparecieron sin dejar rastro durante una misión de entrenamiento. Tampoco se encontró ningún vestigio del avión que fue enviado a buscarlos. En total, se perdieron 27 vidas humanas.
Este hecho llamó la atención de los medios de comunicación y de algunos escritores, que empezaron a difundir la idea de que en esa zona había algo extraño o sobrenatural que causaba las desapariciones. Se habló de fenómenos paranormales, de portales a otras dimensiones, de ovnis, de la ciudad perdida de la Atlántida y hasta del diablo.
Sin embargo, investigaciones posteriores revelaron que los aviones se habían perdido por un error humano y una falla técnica. Al parecer, el líder del escuadrón se desorientó por un mal funcionamiento del compás y condujo a sus compañeros hacia mar abierto hasta quedarse sin combustible. El avión de rescate también sufrió una avería y explotó en el aire.
El mito se alimenta
A pesar de esta explicación, el mito del triángulo de las Bermudas siguió creciendo con el paso del tiempo. Se le atribuyeron otras desapariciones ocurridas en la zona, como la del carguero Cyclops en 1918, la del avión Star Tiger en 1948, la del avión Star Ariel en 1949 o la del yate Connemara IV en 1955.
Sin embargo, muchos de estos casos también tienen una explicación lógica basada en las condiciones meteorológicas, los errores humanos, los problemas mecánicos o los ataques piratas. Además, no hay evidencia de que el número o la frecuencia de las desapariciones en el triángulo de las Bermudas sea mayor que en otras zonas marítimas similares.
La ciencia responde
Los científicos han descartado la existencia de cualquier fenómeno anormal o inexplicable en el triángulo de las Bermudas. Algunas hipótesis que se han propuesto para explicar las desapariciones son las siguientes:
Las corrientes marinas: el triángulo de las Bermudas está atravesado por la corriente del Golfo, una poderosa corriente oceánica que puede arrastrar objetos y restos hacia el mar abierto o hacia otras zonas costeras.
Los campos magnéticos: el triángulo de las Bermudas coincide con uno de los puntos donde el norte magnético y el norte geográfico se alinean. Esto podría causar interferencias en los instrumentos de navegación o comunicación, pero no es algo exclusivo de esa zona ni suficiente para provocar una desaparición.
Las erupciones submarinas: el triángulo de las Bermudas está situado sobre una zona volcánica activa, donde pueden producirse erupciones submarinas que liberan gases como el metano. Estos gases podrían reducir la densidad del agua y hacer que los barcos se hundan o alterar el funcionamiento de los motores o los radares.
Los fenómenos atmosféricos: el triángulo de las Bermudas está expuesto a tormentas, huracanes, rayos y trombas marinas que pueden afectar a la navegación aérea o marítima. Estos fenómenos pueden generar fuertes vientos, olas gigantes, turbulencias o cambios bruscos de presión que pueden dañar o derribar a los vehículos.
En conclusión, el triángulo de las Bermudas no es más que una zona geográfica normal, donde pueden ocurrir accidentes o desapariciones por causas naturales o humanas, como en cualquier otra parte del mundo. El misterio que lo rodea se basa en la falta de información, la exageración o la imaginación de algunas personas que prefieren creer en lo fantástico antes que en lo real..