En la década de los 90, Ecuador vivió un episodio que sigue generando controversia y debate, protagonizado por el entonces presidente Abdalá Bucaram y el astro argentino Diego Armando Maradona. La historia involucra una oferta de 500 mil dólares para que Maradona se uniera al club Barcelona SC de Guayaquil, un acuerdo que nunca se concretó, pero que dejó un gran escándalo.
El contexto detrás de la oferta es curioso. Bucaram, conocido por su estilo extravagante y su tendencia a tomar decisiones polémicas, buscaba elevar el perfil del fútbol ecuatoriano, en particular del equipo guayaquileño. En un intento por atraer a una de las grandes estrellas del fútbol mundial, el presidente ecuatoriano habría ofrecido medio millón de dólares a Maradona para que se uniera a su equipo.
Sin embargo, la expectativa de los aficionados se desmoronó rápidamente. Maradona nunca llegó a Ecuador, y la pregunta sobre el destino de esos $500 mil dólares comenzó a rondar. A lo largo de los años, se alegó que el famoso «Pelusa» no solo ignoró la oferta, sino que también habría evadido devolver el dinero. Este episodio se convirtió en un escándalo que afectó no solo la imagen de Maradona, sino también la gestión del dinero público de Bucaram.
La controversia aumentó aún más cuando se reveló que no existía un contrato formal que respaldara el acuerdo, lo que contribuyó a que el escándalo se agrandara. Las críticas hacia Bucaram por la falta de transparencia y los problemas con la gestión de los fondos públicos se hicieron eco en los medios y en la opinión pública.
A lo largo de los años, esta historia se ha convertido en un tema recurrente de discusión tanto en el ámbito futbolístico como político. Para algunos, es un ejemplo de la imprudencia de Bucaram; para otros, es un triste recordatorio de los problemas y enredos económicos que pueden surgir en el mundo del deporte profesional.
Hoy en día, el episodio sigue vivo en la memoria colectiva, no solo como una anécdota sobre el fútbol ecuatoriano, sino también como un ejemplo de las complejidades que pueden surgir cuando las figuras públicas, como Maradona y Bucaram, interactúan en el mundo de los negocios deportivos. Aunque Maradona dejó una huella imborrable en el fútbol mundial, su breve vínculo con Ecuador se recordará por este peculiar y controvertido episodio.