En el competitivo mundo del fútbol, los destinos de los jugadores pueden cambiar drásticamente en poco tiempo. Un ejemplo reciente de esta situación es Pablo Lavandeira, quien pasó de ser una estrella en Alianza Lima a perderse en la provincia defendiendo los colores de FBC Melgar.
Lavandeira, campeón con Alianza hace algunas temporadas, se encontraba en su mejor momento en Matute, generando expectativas incluso de ser considerado para la Selección Peruana. Sin embargo, su rendimiento ha decaído notablemente desde su llegada a Melgar, donde no logra destacar como lo hizo en el pasado.
Este declive en su desempeño se refleja en la falta de interés tanto de los aficionados como del ámbito deportivo local por su participación en la Blanquirroja. A pesar de haberse nacionalizado y soñar con vestir la camiseta de la selección, actualmente no cuenta con el nivel necesario para impresionar al cuerpo técnico liderado por Jorge Fossati.
El irregular inicio de temporada de Melgar también ha contribuido al bajo rendimiento de Lavandeira, ya que el equipo no ha logrado marcar la diferencia como en campañas anteriores. Esta situación ha provocado que el talentoso volante no genere la misma atención entre los aficionados ni en el ámbito deportivo local.
Además, la abundancia de opciones en el mediocampo de la Selección Peruana, con jugadores destacados como Renato Tapia, Pedro Aquino y Yoshimar Yotún, entre otros, complica aún más las posibilidades de Lavandeira de ser considerado para futuras convocatorias.
En conclusión, el futuro de Lavandeira en Videna parece incierto, ya que actualmente no logra destacar con la camiseta de Melgar y enfrenta una fuerte competencia en la selección nacional.