El empate 1-1 entre Alianza Lima y Nacional de Paraguay, por la Copa Libertadores, dejó un sabor agridulce para la hinchada blanquiazul. Aunque el equipo logró rescatar un punto valioso en su visita a Asunción, la mala noticia vino con la lesión de Paolo Guerrero, cuyo golpe encendió las alarmas dentro del club y generó gran preocupación entre los aficionados.
El experimentado delantero peruano sufrió un golpe en el tobillo durante el segundo tiempo del partido, en una jugada en la que luchaba por el balón. Tras la caída, Guerrero se levantó cojeando y con evidentes signos de dolor, lo que obligó al cuerpo técnico a retirarlo del campo de juego. Este incidente ha generado gran incertidumbre sobre su disponibilidad para los próximos encuentros.
Con la posible ausencia de Guerrero, la pregunta sobre quién ocupará su lugar en el ataque es inevitable. El principal candidato es Hernán Barcos, quien ingresó en el segundo tiempo ante Nacional y anotó el gol del empate de penal. El delantero argentino tiene la experiencia y la capacidad goleadora necesaria para liderar la delantera de Alianza Lima en los próximos partidos importantes.
Aunque el club aún no ha confirmado la gravedad de la lesión de Guerrero, se espera que emita un comunicado oficial en las próximas horas con el diagnóstico y el tiempo estimado de recuperación. Cualquier lesión en el tobillo requiere tiempo para rehabilitarse, por lo que Guerrero podría perderse algunos partidos clave en el camino de Alianza Lima en la Copa Libertadores.
El próximo partido de vuelta contra Nacional de Paraguay, programado para el 12 de febrero en el estadio Alejandro Villanueva (Matute), será crucial para definir el futuro del equipo en el torneo continental. Para avanzar a la siguiente fase, Alianza Lima necesita ganar el encuentro. Sin Paolo Guerrero, la tarea se presenta difícil, pero los hinchas confían en que el equipo superará esta adversidad y luchará por la clasificación.