Poe se quedó huérfano, pero lo recogió una familia adinerada. Nació en Estados Unidos, aunque se educó en Europa, donde aprendió francés y latín. De adolescente nadó siete kilómetros en un río, contra la corriente, para impresionar a sus amigos: era un atleta.
Abandonó la universidad, porque el juego y el alcohol lo envilecieron. Se metió a soldado y luego estudio para oficial cuando su padrastro le perdonó sus fechorías, pero lo expulsaron por no ir a misa. Su padrastro nunca más lo ayudó.
Llegó a ser famoso en todo EE.UU., pero pagaban tan poco a los escritores que, por publicar El cuervo, el poema que lo hizo conocido, sólo recibió 9 dólares.
Un día fue hallado delirando y enloquecido en las calles: dicen que estaba ebrio, aunque nadie sabe exactamente lo que le pasó. Murió en el hospital. Tenía 40 años, pero fue suficiente para dejar una huella profunda en la humanidad.