En el contexto tributario, las «cinco categorías de renta» generalmente se refieren a la clasificación de ingresos que se utiliza en algunos países, como Perú, para determinar la base imponible y calcular los impuestos sobre la renta de las personas naturales. Estas cinco categorías, también conocidas como «escalas de renta», son las siguientes:
1.-Primera Categoría: Incluye ingresos provenientes de actividades empresariales, como utilidades de empresas, alquileres y regalías.
2.-Segunda Categoría: Comprende ingresos del trabajo dependiente, es decir, los salarios y sueldos que reciben los empleados por su trabajo.
3.-Tercera Categoría: Incluye ingresos de capitales mobiliarios, como intereses, dividendos y ganancias de la venta de bienes muebles.
4.-Cuarta Categoría: Esta categoría se aplica a los trabajadores independientes o autónomos, como profesionales que emiten recibos por honorarios, y sus ingresos se gravan por separado.
5.-Quinta Categoría: Cubre otros ingresos que no se incluyen en las categorías anteriores, como premios de la lotería, herencias y donaciones, entre otros.
Es importante destacar que las tasas de impuestos y las deducciones aplicables pueden variar según la categoría de renta y las leyes fiscales específicas de cada país. Además, las categorías de renta pueden tener subcategorías o clasificaciones adicionales según las normativas fiscales de cada lugar. Por lo tanto, es crucial consultar con un profesional de impuestos o la autoridad tributaria local para comprender cómo se aplican las categorías de renta en tu país y cómo afectan tus obligaciones fiscales personales.