Los folículos pilosos de una cabeza rapada tardan dos semanas en empezar a regenerar el cabello rapado. Una vez que empiezan a crecer de nuevo, suelen progresar a un ritmo de medio o un centímetro al mes (entre 8 y 12 centímetros al año). Sin embargo, la experiencia de cada persona puede variar.
El crecimiento del cabello es un proceso complejo en el que intervienen muchas partes del cuerpo. Comienza en el folículo, una pequeña bolsa de tejido situada bajo la superficie de la piel, a partir de la cual crece cada mechón de pelo. El folículo se compone de dos partes: una vaina radicular interna y una vaina radicular externa. La vaina radicular interna contiene células que producen nuevos cabellos a medida que se dividen y crecen. Estas células empujan hacia arriba a través de la vaina radicular externa para formar un nuevo mechón de pelo por encima de la superficie de la piel. En la base de cada folículo hay un pequeño haz de músculos denominados arrector pili. Cuando estos músculos se contraen, hacen que el folículo se mueva ligeramente, lo que provoca la piel de gallina y pone los pelos de punta cuando hace frío o cuando uno está asustado o excitado.
El pelo rapado puede dar un aspecto nuevo y estupendo, pero recuerda tener paciencia; el pelo de una cabeza rapada puede tardar hasta tres meses en alcanzar su longitud total. El cuidado y la higiene adecuados pueden ayudar a acelerar el proceso.