Estados Unidos es un país con una historia rica y diversa, pero también con muchos lugares que quedaron en el olvido. Son los pueblos abandonados o ghost towns, que alguna vez fueron prósperos y vibrantes, pero que por diversas razones se quedaron vacíos y desolados.
Algunos de estos pueblos fueron fundados durante la fiebre del oro o la plata, y se convirtieron en centros mineros que atrajeron a miles de personas en busca de fortuna. Otros fueron víctimas de la construcción de nuevas vías ferroviarias o carreteras, que los dejaron aislados y sin futuro. Y otros simplemente sucumbieron al paso del tiempo, a las catástrofes naturales o a la falta de recursos.
Según el New York Times, existen unos 3.800 pueblos abandonados en Estados Unidos, la mayoría de ellos entre los siglos XIX y XX. Sin embargo, no todos están completamente perdidos. Algunos se han convertido en atracciones turísticas, museos al aire libre o escenarios de películas. Estos son algunos de los pueblos abandonados más interesantes que puedes visitar en Estados Unidos:
Kennecott, Alaska: Fue un pueblo minero de cobre que se fundó en 1903 con el apoyo de J.P. Morgan y los Guggenheim. Llegó a producir más de 200 millones de dólares en cobre, pero se agotó en 1938. Hoy es un Monumento Histórico Nacional y se puede recorrer su impresionante molino rojo de 14 pisos sobre un glaciar.
St. Elmo, Colorado: Fue un pueblo minero de oro que se fundó en 1880 y que llegó a tener más de 2.000 habitantes. Era una parada popular del ferrocarril del Pacífico y contaba con hoteles, tiendas y salones. Sin embargo, el declive de la minería y un incendio en 1922 lo llevaron a su abandono. Hoy se puede visitar sus edificios históricos y alquilar un ATV para recorrer sus caminos.
Bodie, California: Fue otro pueblo minero de oro que se fundó en 1859 y que llegó a tener más de 10.000 habitantes. Era conocido por su ambiente salvaje y violento, lleno de bares, burdeles y tiroteos. Sin embargo, la caída del precio del oro y el aislamiento geográfico lo hicieron perder población hasta quedar desierto en 1942. Hoy es un Parque Histórico Estatal y se conserva tal como se quedó, con sus muebles, utensilios y objetos personales intactos.
Virginia City, Montana: Fue la capital del territorio de Montana entre 1865 y 1875, gracias a su riqueza minera de oro y plata. Llegó a tener más de 10.000 habitantes y era el centro cultural y comercial de la región. Sin embargo, la competencia de otras ciudades y la disminución de la minería lo hicieron perder importancia hasta quedar casi vacío en 1920. Hoy es una ciudad museo que se puede visitar y que tiene más de 300 edificios históricos.
Glenrio, Texas/Nuevo México: Fue un pueblo fronterizo entre Texas y Nuevo México que se fundó en 1903 como una parada del ferrocarril Rock Island and Pacific Railroad. Luego se convirtió en una estación de servicio para los viajeros de la Ruta 66, ofreciendo gasolina, comida y alojamiento. Sin embargo, la construcción de la Interestatal 40 en 1973 lo dejó fuera del mapa y lo llevó a su abandono. Hoy se puede ver sus carteles oxidados y sus edificios deteriorados.
Rhyolite, Nevada: Fue un pueblo minero de oro que se fundó en 1904 y que llegó a tener más de 5.000 habitantes. Contaba con electricidad, agua corriente, teléfono, escuelas, hospitales y bancos. Sin embargo, el pánico financiero de 1907 y el agotamiento de las minas lo hicieron entrar en decadencia hasta quedar deshabitado en 1920. Hoy se puede ver sus ruinas de piedra y metal, así como algunas obras de arte contemporáneo que se han instalado en el lugar.
Batsto Village, Nueva Jersey: Fue un pueblo industrial que se fundó en 1766 y que se dedicó a la producción de hierro, vidrio y papel. Fue un proveedor importante para el ejército continental durante la Guerra de Independencia y para la Marina durante la Guerra de 1812. Sin embargo, la competencia de otras industrias y el cambio de las fuentes de energía lo hicieron perder rentabilidad hasta quedar abandonado en 1989. Hoy es un Parque Histórico Estatal y se puede visitar sus edificios restaurados y su museo.
Dawson, Nuevo México: Fue un pueblo minero de carbón que se fundó en 1901 y que llegó a tener más de 9.000 habitantes. Era propiedad de la compañía Phelps Dodge Corporation, que proveía de vivienda, educación, salud y entretenimiento a sus trabajadores. Sin embargo, dos desastres mineros en 1913 y 1923 que causaron la muerte de más de 400 mineros y la caída de la demanda de carbón durante la Gran Depresión lo hicieron cerrar sus minas en 1950. Hoy solo queda su cementerio y algunas ruinas.