Las armas termobáricas, como las bombas de fuel-air, han sido utilizadas en conflictos modernos en el pasado, pero su uso ha sido limitado debido a varias razones:
1.-Controversia y preocupaciones éticas: Las armas termobáricas tienen el potencial de causar una gran destrucción y numerosas víctimas, lo que ha generado preocupaciones éticas y críticas sobre su uso. Estas armas pueden tener un impacto devastador en áreas densamente pobladas y causar daños colaterales significativos.
2.-Convenciones internacionales: Varios tratados y convenciones internacionales, como la Convención sobre Ciertas Armas Convencionales (CCW), imponen restricciones al uso de armas que causan sufrimiento excesivo o indiscriminado. Algunos países han limitado o prohibido el uso de armas termobáricas en cumplimiento de estas convenciones.
3.-Alternativas más precisas: En muchos casos, las fuerzas armadas han optado por utilizar armas más precisas y dirigidas, como misiles guiados y drones, que pueden reducir el riesgo de daños colaterales y ser más eficaces en situaciones específicas.
4.-Conciencia pública: La conciencia pública sobre el impacto humanitario de las armas termobáricas ha aumentado, lo que ha llevado a un escrutinio más riguroso sobre su uso y una presión para limitar su empleo.
En general, aunque las armas termobáricas todavía pueden encontrarse en arsenales militares en algunos países, su uso se ha vuelto menos común debido a las preocupaciones éticas, las restricciones legales y la preferencia por alternativas más precisas y efectivas en situaciones militares.