El presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Agustín Lozano, se enfrenta a una grave crisis que podría poner en riesgo su permanencia al frente del ente deportivo más importante del país. El Poder Judicial le dio la razón al Consorcio, que agrupa a los clubes Alianza Lima, Cienciano, Binacional y Melgar, y dejó sin efecto la medida cautelar que le otorgaba a 1190 Sports la exclusividad de los derechos televisivos de la Liga 1.
Esta decisión judicial afecta seriamente el modelo de negocio de 1190 Sports, que había lanzado la plataforma Liga 1 Max para transmitir los partidos del torneo local. Al no contar con la exclusividad de los equipos más populares del país, la empresa podría perder varios suscriptores y ver reducidos sus ingresos.
Además, este fallo abre la puerta a una batalla legal más compleja, en la que se podrían revelar más detalles sobre los negocios de Agustín Lozano, quien está siendo investigado por el Ministerio Público por los presuntos delitos de extorsión, coacción y organización criminal. El dirigente también es acusado de enriquecimiento ilícito cuando fue alcalde de Chongoyape.
Agustín Lozano llegó a la presidencia de la FPF en diciembre del 2018, tras la detención de su antecesor Edwin Oviedo, por sus presuntos vínculos con bandas de crimen y corrupción organizadas. En el 2021, fue elegido para el periodo 2021-2025. Sin embargo, su gestión ha estado marcada por la polémica y el descontento de varios clubes y dirigentes.