La Comisión Disciplinaria de la Federación Peruana de Fútbol (FPF) ha emitido una sanción drástica y sin precedentes contra Alianza Lima, con motivo del apagón ocurrido en su estadio, el Alejandro Villanueva (Matute), durante la final de la Liga 1 2023. El club ‘blanquiazul’ se enfrentará a una suspensión de siete meses de su estadio y deberá pagar una multa de 20 Unidades Impositivas Tributarias (UIT), equivalente a 99 mil soles.
La sanción surge como consecuencia de la decisión del administrador de Alianza Lima, José Sabogal, de apagar las luces de Matute para evitar que su archirrival, Universitario de Deportes, celebrea la obtención del título de la Liga 1 2023 después de ganar por 3-1. en el global.
El comunicado oficial de la Comisión Disciplinaria detalla las medidas impuestas a Alianza Lima: «Primero: sancionar al club Alianza Lima con el cierre de su estadio (Estadio Alejandro Villanueva) por el período de siete (07) meses computados desde la notificación de la presente decisión, conforme a los considerandos desarrollados en la presente resolución. Segundo: Multar al club Alianza Lima con el monto de veinte (20) UIT conforme a los considerandos desarrollados en la presente resolución. Tercero: Notificar la presente resolución al club Alianza Lima ya la Liga de Fútbol Profesional, para su conocimiento y cumplimiento».
Con esta sanción, Alianza Lima no podrá disputar ningún partido en su estadio hasta julio de 2024. La incógnita sobre si el club podrá contar con público en su nueva sede alterna durante el primer semestre del próximo año queda por resolver. En el presente 2023, Alianza Lima eligió el Estadio Nacional como su sede alterna.
El incidente del apagón ocurrió durante la final de vuelta de la Liga 1 2023 entre Alianza Lima y Universitario. Después de que Universitario se impusiera en el campo, los hinchas de Alianza Lima lanzaron bengalas y, de manera sorprendente, las luces del estadio se apagaron al final del partido. Este inusual apagón tuvo consecuencias negativas, incluyendo quejas de los aficionados y denuncias de robo de equipos gráficos y fotógrafos presentes en el estadio.
José Sabogal, administrador del club, admitió su responsabilidad en el incidente, argumentando que su decisión tenía como objetivo principal garantizar la seguridad de las personas tanto dentro como fuera del estadio. La repercusión negativa de este incidente ha llevado a la histórica sanción impuesta por la Comisión Disciplinaria de la FPF.