Después de un complicado año 2023 bajo la dirección de Juan Reynoso, donde la Selección Peruana solo logró 2 puntos de 18 posibles en las Eliminatorias rumbo al Mundial 2026, la llegada de Jorge Fossati como nuevo director técnico podría marcar un cambio significativo, especialmente en la relación interpersonal con los seleccionados.
A diferencia de su predecesor, Fossati tiene planeado realizar viajes para conversar y conocer personalmente a los jugadores de la Bicolor. Este enfoque en el acercamiento humano se presenta como una estrategia para mejorar las relaciones dentro del equipo, algo que se percibió deficiente en el periodo de Reynoso y que no se tradujo de la mejor manera en el rendimiento en el campo de juego.
Además de los encuentros personales, el estratega uruguayo tiene en mente otra táctica que busca consolidar su vínculo con los jugadores. Aprovechando la inactividad de enero y febrero, Fossati buscará fortalecer lazos con los referentes del equipo, entre los que se encuentran Paolo Guerrero, Luis Advíncula, Renato Tapia y Pedro Gallese. Este acercamiento tiene como objetivo enfatizar su proyecto y construir una base sólida para enderezar el rumbo de la Bicolor.
Según informó el diario ‘Líbero’, Fossati tiene en agenda reuniones con estos jugadores clave antes de concentrarse en los dos amistosos programados para marzo. Su meta es llegar fortalecido a la Copa América, considerándola como una prueba crucial para lograr una buena convivencia y el entendimiento de su filosofía de juego.
La estrategia de Fossati se basa en ganar la aceptación y el compromiso al 100% de los jugadores más experimentados y líderes en el vestuario. Esta jugada maestra busca allanar el camino para una integración más fluida y eficiente en los trabajos y planificaciones cuando se reúna con el resto del equipo en la Videna.