En un giro inesperado durante el partido entre César Vallejo y DIM, el experimentado delantero peruano, Paolo Guerrero, tomó una decisión radical al no salir para el segundo tiempo y permanecer ausente en el banquillo de suplentes, generando sorpresa y desconcierto entre los aficionados y la comunidad deportiva.
Guerrero, reconocido como uno de los mejores jugadores de Perú y máximo goleador histórico de la Selección Peruana, ha vivido momentos difíciles en su paso por César Vallejo, equipo que atraviesa una racha adversa de resultados en los diferentes torneos en los que participa.
El partido contra DIM fue testigo de una acción poco habitual por parte del delantero, quien decidió no salir para el segundo tiempo y permanecer en el vestuario, desatando especulaciones sobre las razones detrás de su inusual comportamiento.
La ausencia de Guerrero en el campo y en el banco de suplentes fue motivo de sorpresa y críticas por parte de los aficionados en las redes sociales, quienes esperaban una actitud más comprometida por parte del capitán del equipo en un momento complicado para César Vallejo.
Resulta llamativo que, pese a su solicitud de «criollada» a su compañero Oliver Sonne, Guerrero no mostrara el respaldo esperado a sus compañeros desde el banquillo de suplentes, generando interrogantes sobre su compromiso con el equipo en esta etapa difícil.
La llegada de Guerrero a César Vallejo, en busca de una nueva oportunidad, ha resultado ser un desafío mayor de lo esperado, con el equipo ubicado en la parte baja de la tabla en la Copa Sudamericana y luchando por evitar el descenso en la Liga 1.
El futuro de Guerrero en el equipo y su relación con la afición y el cuerpo técnico quedan en incertidumbre tras este episodio inusual, que deja más interrogantes que respuestas sobre la situación del experimentado delantero en César Vallejo.