Para que la Selección Peruana logre una victoria ante Ecuador, Jorge Fossati debería considerar volver a la estrategia que empleaba Ricardo Gareca durante las Eliminatorias pasadas. Este regreso a las raíces del equipo podría ser crucial para sumar tres puntos y mantener vivas las aspiraciones de la selección.
El esquema táctico más efectivo en las eliminatorias anteriores fue el 4-2-3-1, en lugar del actual 3-5-2 que no ha dado los resultados esperados. El 4-2-3-1 permitiría a Perú utilizar mejor las bandas, generando más oportunidades de ataque, algo que ha sido un punto débil con el sistema actual. Con una línea de cuatro defensores y extremos bien posicionados, la selección podría superar las dificultades que presenta el equipo ecuatoriano, conocido por su rapidez y habilidades técnicas.
En esta formación, Gianluca Lapadula debería ser el delantero centro, ya que ha demostrado ser efectivo a pesar de la altura. Lapadula podría aprovechar su capacidad de lucha y físico para liderar el ataque. En las bandas, jugadores como Bryan Reyna y Andy Polo tienen el potencial para ser decisivos, mientras que Marcos López y Luis Advíncula aportarían su experiencia para contrarrestar a los carrileros rivales y potenciar el ataque.
El sistema actual de 3-5-2 ha mostrado limitaciones, especialmente en la generación de juego por las bandas y en el mediocampo. Fossati necesita adaptar la táctica para sacar el máximo provecho de los extremos y mejorar el rendimiento ofensivo del equipo. Utilizar a jugadores como Andy Polo, Joao Grimaldo y Bryan Reyna en sus posiciones naturales podría marcar la diferencia y proporcionar a Perú las herramientas necesarias para superar a Ecuador.
En resumen, Jorge Fossati debería considerar seriamente volver al esquema 4-2-3-1 y potenciar las bandas para enfrentar a Ecuador, aprovechando las características de sus jugadores para mejorar el rendimiento del equipo y asegurar una victoria clave.