Ante la reciente decepción de la Selección Peruana en la Copa América y las conductas cuestionadas de jugadores como Christian Cueva y André Carrillo, Jorge Fossati podría tomar medidas drásticas para reestructurar el equipo nacional. Si decide prescindir de ellos, dos promesas emergentes podrían ocupar su lugar en futuras convocatorias: Kenji Cabrera y Catriel Cabellos.
Fossati, consciente de la necesidad de renovación y disciplina en el equipo, podría apostar por jóvenes talentos como Cabrera y Cabellos, quienes han destacado en la Liga 1 y podrían aportar frescura y compromiso a la blanquirroja. Se especula que podrían ser invitados a entrenar con el equipo nacional de cara a los próximos desafíos, una oportunidad para demostrar su valía y compromiso con la camiseta nacional.
Cabellos, de apenas 19 años, ha brillado esta temporada con Alianza Lima mostrando calidad y liderazgo en el campo. Por su parte, Cabrera es un pilar en FBC Melgar y cuenta con experiencia previa en selecciones juveniles, lo que podría facilitar su adaptación a mayores responsabilidades.
Los hinchas peruanos, cansados de jugadores que no reflejan compromiso y disciplina, ven con buenos ojos la posible inclusión de nuevos talentos que puedan rejuvenecer y fortalecer el equipo nacional. Más allá de los resultados deportivos, se espera que los jugadores de la selección muestren respeto y sensatez en sus acciones dentro y fuera del campo, aspectos fundamentales para el desarrollo grupal y la cohesión del equipo bajo la dirección de Fossati.
La situación actual en la interna de la Selección Peruana sugiere la necesidad de decisiones valientes y estratégicas por parte del cuerpo técnico, con miras a construir un equipo competitivo y comprometido con los objetivos futuros del fútbol peruano.