Un grupo de migrantes venezolanos ilegales han estado acampando en la frontera entre Perú y Chile, intentando ingresar a Tacna de manera irregular para trasladarse a su país de origen. El gobierno peruano ha mantenido la frontera cerrada, lo que ha llevado a los migrantes a amenazar con convertir la frontera en sangre si no se les permite el ingreso inmediato.
Los migrantes, que incluyen a muchas familias con niños, han estado en la frontera durante seis días, y han expresado su desesperación por las difíciles condiciones en las que se encuentran. Aunque algunos de ellos desean regresar a Colombia con sus familias, no cuentan con los documentos en regla para poder pasar por Perú.
A medida que la tensión en la frontera continúa aumentando, la Policía Nacional del Perú (PNP) y miembros de la División Nacional de Operaciones Especiales (Dinoes) han sido desplegados para resguardar la frontera.
La amenaza de los migrantes venezolanos ha generado preocupación en la población local, y diversas instituciones cívicas y patrióticas han exigido que no se permita el ingreso de extranjeros indocumentados. La situación en la frontera sigue siendo tensa, y se espera que las autoridades tomen medidas para resolver el problema de manera pacífica.
Fuente: Infórmate Perú