Los primeros africanos que llegaron al Perú trabajaron como soldados invasores españoles durante la Conquista y las guerras civiles en el siglo XVI.
Posteriormente, ante la disminución de la población indígena debido a las guerras y las enfermedades, fueron traídos por los españoles, desde Guinea, Angola, el Congo, y Monzabique, aproximadamente, 3 000 000 de esclavos de las etnias Congo, mantenga, cambado, misanga, mozambique, terranova, mina y angola, fueron repartidos especialmente en las costas sur (Chincha) y norte (Piura) durante todo el periodo colonial.