Muchos chinos migrantes que lograron liberarse de la semiesclavitud en el siglo XIX, se dedicaron al negocio de las fondas (comida y hospedaje) para los sectores populares en Camaná o Huánuco. Así surgieron los chifas.
Un claro ejemplo es el barrio chino de Lima o calle Capón, lugar de comercio desde tiempos coloniales y donde miles de chinos se aglomeraron en casa Otaiza, un lugar de juego y venta de comida china.
Como se sabe, los términos cantoneses ‘chi’ y ‘fan’ significan, respectivamente, ‘comer’ ‘arroz’. Ahora bien, en el Perú, la palabra ‘chifa’ no solo se refiere al lugar donde se vende comida china o chino-peruana, sino también a la comida.