Muerte que todos te tememos
No te queremos ni mentar
Tarde o temprano a tu lado iremos
Aunque nos neguemos aceptar.
No entendemos en nuestro egoísmo
Que calmas heridas lacerantes
Das paz a los que rodaron al abismo
Consuelo a los vicios aberrantes.
Traes remedio a los dolores
A la pena, angustia y llanto
Purificas el odio y los horrores
Sin embargo te vemos con espanto.
Muerte que nos privas del sufrimiento
Te vemos como un agente sin piedad
Tú cercanía es motivo de arrepentimiento
A nuestra soberbia y maldad.
02-10-1992
Beto del Parral